
I
El aire insoportable de un mundo invisible nos corta la respiración,
es la asfixia heredada
que ha dejado mella en nuestros huesos.
Hemos nacido en el miedo
y en el miedo se nos ha socializado
una palabra aguda marca nuestras espaldas
una palabra aguda marca nuestras vidas
O-PRE-SIÓN
nos recuerda lo que debemos ser
lo que no debemos hacer,
¡Por amor de Dios cierra las piernas!
¡Por amor de Dios traga y sé sumisa!
Nos han arrullado en los agridulces brazos de la mística
y hemos dormido
y hemos soñado
en camas que no son nuestras sueños implantados,
en cuerpos que no son nuestros nos han empaquetado.
Mi cuerpo es mío no lo quiero mutilado.
Mientras esta ceguera se dilate repetimos los gestos aprendidos
como falsas muecas memorizadas,
repetiremos las palabras programadas como soliloquios infinitos
gestos y palabras legadas
esta asfixia es mía
mía me lo han grabado.
II
Pero la sospecha anida
en nosotras
LAS MUJERES
Porque ya no creemos en la superioridad del varón,
porque lo masculino esta caduco
y olor a sarna se acrecienta,
y rechazamos la soberbia del hombre
que un día,
inflado por los buenos vientos de un pasado inmemorable,
de mil formas
nos desterró de lo humano.
Iniciamos a anhelar…
palabras de nuestras antepasadas
que no nos cantaron en la cuna...
¡oh! pobres criaturas que osan repudiar de su destino.
- dirán -
La inoculación de nuestras mente
la plantación de cuerpos
en nuestros cuerpos
para otros cuerpos
ha de terminar.
III
Queremos ser nosotras mismas
La feminidad es un traje muy pesado de cargar
La feminidad es un traje que ya no queremos portar.
Y cayó la ultima gota en este enorme cántaro de miles de años
la injusticia aguijoneaba nuestros corazones
así que abrimos los ojos
reconocimos el camino.
Lo que se nos fue negado acrecentó nuestros sentidos
retrocedimos…
para poder avanzar por donde borraron una a una todas muestras marcas
No somos huérfanas
no hemos inventado nuestra heredad
somos hijas de las grandes mujeres que no quisieron aguantar más.
Andrea Longar ( @terramonstrua )
Escribir comentario